Celsius 9/15

Decía yo el orgullo que me da ser mexicano y pese a todo sigo sintiendo lo mismo. Sin embargo hoy me siento triste y no por los mexicanos, sino por aquellos que atentan contra su propio país y contra aquellos que nada deben ni temen.

Lo ocurrido anoche indigna profundamente a cada mexicano que se siente como tal, pero también nos pone a reflexionar sobre todo lo que ha venido pasando.

Primero empezaron matando policías, funcionarios de gobierno; luego se fueron con los hijos de los empresarios, los mismos empresarios hasta el punto de secuestrar, callar a gente inocente que no tiene nada que ver. El vaso estaba ya a rebasar y anoche cayó la gota que derramó el vaso: dos explosiones en el centro histórico de Morelia, Michoacán, que dejan hasta el momento 8 muertos y 101 lesionados, durante las celebraciones del inicio de la lucha por la independencia.

Pero el terrorismo no es sólo eso, sino imprimir el miedo entre los que vivimos en un lugar determinado. En Tabasco ayer se rumoreaba de posibles atentados durante los mismos festejos y por ello hubo un despliegue de fuerzas de seguridad alrededor de Plaza de Armas. Y no sucedió nada. Al menos no aquí. Y llevamos semanas así. Es verdad que la gente se está yendo y los que nos quedamos tendremos que seguir con la frente en alto. El que nada debe, nada teme.

Reflexionaba también el por qué esto no sucedía con los otros gobiernos, pues todos sabemos que los ellos querían tapar el sol con varios billetes de $500 para hacer como que no pasaba nada y ahora que el gobierno tanto Federal como Estatal (refiriéndome a Tabasco, pues desconozco lo que se haga en los demás) le han dado una lucha que parece interminable y que ha desatado, en consecuencia, todos aquellos actos violentos vividos en los días, semanas y meses pasados.

¿Qué más tiene que pasar? Señores, denunciar es una herramienta de doble filo, pero se le puede exigir al gobierno. Exijan, pues sólo así tomarán medidas más severas. Sí, muchos tendrán que morir probablemente o, en menor grado, sufrir, pero es el precio que tenemos que pagar por descuidar tanto a nuestro querido país por tanto tiempo. Y si realmente te sientes mexicano no dudarás en hacerlo. Ya el presidente Felipe Calderón hizo un llamado a la unidad, porque, creanlo o no, el Estado no puede sólo. El país lo hacemos todos, no sólo el señor presidente y lo he dicho en repetidas ocasiones.

Jóvenes, nuestros padres tienen toda la razón del mundo para no dejarnos salir. Es parte del miedo, pero mientras las cosas no estén mejor en el Estado y en México es mejor tomar todo tipo de medidas para protegernos.

Sólo espero que esto sea un mal sueño pasajero y que pronto podamos sentirnos libres, como alguna vez lo fuimos y cuando el miedo no reinaba. NO que volvamos a lo mismo, sino que mejoremos como país. Y que esas 8 muertes y esos 101 heridos nos abran los ojos a todos y sobre todo a nuestros políticos.

Por respeto, no pondré ninguna foto del suceso. Si lo que te interesa es la nota roja busca otro espacio.